Mordrouk

Cuando Cagrohan se enteró de que los estudiantes de Aldrick no solo sobrevivieron, sino que también se apresuraron al Observatorio sellado, su furia no conocía límites. No podía permitir que la magia del Abismo se liberara.
 
Para enterrar definitivamente el legado de Aldrick, El primer Demonio reforzó las defensas del Observatorio. Para ello, ordenó la creación de Un perro mordrouk de tres cabezas. La creación no conocía la compasión ni el cansancio. Durante siglos, se mantuvo en el puesto y atacó a todos los que se atrevieron a acercarse al lugar Prohibido.
 
Con el tiempo, el Abismo comenzó a filtrarse a través de las grietas en la impresión, que se superpuso al Observatorio. Y el primero que tocó fue Mordrouk. La magia entró en su mente, distorsionó su esencia misma. El gran guardián dejó de ser un sirviente de Kagrohan, se sometió al Abismo y dejó su puesto. Los chamanes intentaron rastrearlo, pero las huellas se rompieron, como si la magia ocultara al fugitivo.
 
Los siglos han pasado, pero los demonios recuerdan a esta criatura y temen que algún día regrese. Y sus intenciones serán claramente desagradables.